Un techo para todos

Hubo una década neoliberal -los noventa- que hizo estragos en nuestro país cuyo saldo principal son los jóvenes que nacieron viendo a sus padres sin trabajo y presos de un sistema político clientelar.Menem fue el reflejo de quienes quisieron vivir bien a cualquier costo,la apatía política permitió que un corrupto como Carlos Menem nos gobernara y que durante los festejos el tan popular bombo estuviera sonando a bordo de 0 km, la clase media consintió, en gran parte, vivir esa convertibilidad sin medir las consecuencias que hoy estamos pagando y que ,muchas veces,reclama en términos de seguridad.

En la actualidad,aparte de la escasez de estadísticas oficiales creíbles, lo palpable es el nivel de violencia acentuado por el consumo de drogas que ,también,transformaron a nuestro país en productor de droga dejando  el estado anterior de tránsito,durante la década menemista.

Hoy la mitad de la población en nuestro país vive en condiciones de pobreza ,con un acentuado aumento de la desigualdad. Aunque este gobierno ha tenido  aciertos no deja de estar exento de denuncias de corrupción y un estilo autoritario,un mal ya repetido en diferentes conducciones nacionales.Acaso puede aplaudirse a un gobierno corrupto porque tiene algunos aciertos?, es como decir,roba pero hace.Esta idea está tan naturalizada que parece inevitable,en realidad, es lo que quieren que creamos,a lo que se suma el mito de que sólo los peronistas pueden gobernar y terminar sus mandatos.

A pesar de todo ello es alentador ver a jóvenes que no creen en el asistencialismo sino en el trabajo comunitario,este es el caso de los jóvenes voluntarios de la organización internacional Un techo para mi país,organización que nació en Chile y que fue expandiéndose a Latinoamérica.

A partir de la idea de construir una casa intervienen y trabajan  de manera que los vínculos que van naciendo generan modos de solucionar otros problemas ,trabajan en comunidad.Tienen el apoyo de empresas y  donaciones particulares pero lo que piden ,con énfasis, a otros jóvenes es cambiar el mundo, sumando su tiempo y su trabajo.

La utopía es necesaria no sólo para saber hacia dónde ir sino para dar cada paso ,aunque sea, aún pequeño.