El jueves a la tarde una leve brisa revelaba el nacimiento de las alas que desplegó sobre la ciudad que lo vio nacer hace 62 años canallas.Con ellas sobrevoló nuestra tristeza, nuestra desolación para dar lugar a su felicidad en el cielo.Los aplausos lo despidieron como un rotundo abrazo,como aquellos amigos que no quieren interrumpir la despedida.
Muchos canallas y leprosos confluyeron en ese campo de juego que es la despedida de un amigo entrañable:el Negro Fontanarrosa.Se fue con un vuelo suave, cumpliendo un destino de ser humano excepcional que supera al escritor,humorista o hincha apasionado de Rosario Central.Se fue porque estaba cansado y ya había dado todo, nos legó tantas sonrisas a través de su Inodoro Pereyra,Boogie y tantos otros personajes a los que dio un agudo humor con gran dosis de inteligencia.
Se fue, pero no para siempre.Ahora está jugando el "segundo tiempo" en una cancha que a los pequeños terrestres nos resulta extraña e insondable.Seguramente está juntando a los "galanes" del cielo para poder seguir con la reunión semanal de amigos o está tomando una pluma de su ala, para seguir dibujando en las nubes a Inodoro o a Eulogia.Cuando miremos al cielo buscando formas entre las nubes ya no será difícil imaginar lo que veamos, los rastros del gran maestro aparecerán en las figuras.
Para terminar aclaro que, como leprosa, lo único que menguará el sopor de la derrota ante los "canallas" será recordar al Negro Fontanarrosa festejando en el cielo.No te olvidaremos y gracias por tanta alegría!
Muchos canallas y leprosos confluyeron en ese campo de juego que es la despedida de un amigo entrañable:el Negro Fontanarrosa.Se fue con un vuelo suave, cumpliendo un destino de ser humano excepcional que supera al escritor,humorista o hincha apasionado de Rosario Central.Se fue porque estaba cansado y ya había dado todo, nos legó tantas sonrisas a través de su Inodoro Pereyra,Boogie y tantos otros personajes a los que dio un agudo humor con gran dosis de inteligencia.
Se fue, pero no para siempre.Ahora está jugando el "segundo tiempo" en una cancha que a los pequeños terrestres nos resulta extraña e insondable.Seguramente está juntando a los "galanes" del cielo para poder seguir con la reunión semanal de amigos o está tomando una pluma de su ala, para seguir dibujando en las nubes a Inodoro o a Eulogia.Cuando miremos al cielo buscando formas entre las nubes ya no será difícil imaginar lo que veamos, los rastros del gran maestro aparecerán en las figuras.
Para terminar aclaro que, como leprosa, lo único que menguará el sopor de la derrota ante los "canallas" será recordar al Negro Fontanarrosa festejando en el cielo.No te olvidaremos y gracias por tanta alegría!
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