La Dra. Louann Brizendine es neuropsiquiatra de la Universidad de California (EE.UU) ,publicó este año,el resultado de sus investigaciones en "El cerebro de la mujer" de Editorial Nuevo Extremo.
Sostiene que de treinta mil genes que hay en el genoma humano hay una variación del 1 % entre los sexos,aunque pequeña, esa diferencia influye de manera notable en cualquier pequeña célula de nuestro organismo.En el SXIX los científicos creían que por tener el cerebro más grande los hombres eran más inteligentes, siendo que en realidad, ambos sexos tienen el mismo número de células,pero en las mujeres aparecen, más densamente, en un espacio menor.
Hasta la década del noventa, se daba poco importancia a la fisiología del cerebro femenino. La Dra. Brizendine notaba la gran cantidad de depresiones en mujeres y cómo las alteraciones químicas que comienzan con la primera menstruación genera efectos neurológicos que repercuten en toda la vida de la mujer.
Con años de investigaciones y con los avances tecnológicos que permiten investigar el cerebro con técnicas no invasivas y en tiempo real,es posible sostener que las hormonas influyen de tal modo en el cerebro de la mujer que:determinan sus prioridades,valores,deseos y comienzan desde el mismo nacimiento.Estamos ante una "realidad femenina" específica:
"Cada estado hormonal -años de infancia , de adolescencia,de citas amorosas,de maternidad y de menopausia- actúa como fertilizante de diferentes conexiones neurológicas,responsables de nuevos pensamientos,emociones e intereses.A causa de las fluctuaciones que comienzan nada menos que a los tres meses y duran hasta después de la menopausia, la realidad neurológica de una mujer no es tan constante como la de un hombre.La de él es como una montaña que van gastando imperceptiblemente en milenios los glaciares,el tiempo, y los profundos movimientos tectónicos de la tierra.La de ella es más bien como el clima,constantemente cambiante y difícil de predecir"
Las diferencias fisiológicas entre los cerebros de ambos sexos se hacen visibles en las diferentes percepciones ante la realidad.Las mujeres tienen un 11 % más de neuronas en el oído y en el centro del lenguaje,del mismo modo el hipocampo -que es el centro de la formación de las emociones y la memoria- está más desarrollado,por lo que las mujeres aparecen más conectadas con sus emociones y las de los demás,al tiempo que recuerda los detalles de situaciones emocionales mientras que para los hombres pasan casi desapercibidos.
Los varones tienen más espacio de su cerebro dedicado al impulso sexual, para la acción y la agresividad.También tienen procesadores mayores en el núcleo del área más antigua del cerebro,la amígdala,centro del miedo que libera la agresión.Es por ello que en cuestión de segundos pueden pasar a la acción de una pelea.
A pesar de las diferencias, las mujeres padecen más los efectos del stréss psicológico del conflicto.Nuestro cerebro, en el mundo salvaje de nuestros antepasados,estaba preparado para superar situaciones de riesgo y peligro de la vida.Actualmente, con la vida moderna ,ello debió adaptarse a sortear las demandas de la vida familiar y profesional que comparada con los hombres pueden generar respuestas de mucho desgaste físico mientras que ellos tendrán una percepción más relajada, a no ser que la familia estuviera ante un peligro inminente.
La Dra.Louann Brizendine considera que las afirmaciones de Lawrence Summers, presidente de la Universidad de Harvad en la que sostuvo que las mujeres están menos dotadas que los hombres para ser científicas o matemáticas, es una mala interpretación de la realidad:
"Sabemos actualmente que cuando los chicos y las chicas llegan a la adolescencia, no hay diferencia en sus aptitudes matemáticas y científicas.(...) en cuanto el estrógeno inunda el cerebro femenino, las mujeres empiezan a concentrarse intensamente en sus emociones y en la comunicación:hablar por teléfono y citarse con sus amigas en la calle.Al mismo tiempo, a medida que la testosterona invade el cerebro masculino,los muchachos se vuelven menos comunicativos y se obsesionan por lograr hazañas en los juegos y en el asiento trasero de un coche.En la fase en que ellas empiezan a decidir las trayectorias de sus carreras,ellas empiezan a perder interés en empeños que requieran más trabajo solitario y menos interacciones con los demás,mientras que los varones pueden fácilmente retirarse a solas sus habitaciones para pasar largas horas delante de la computadora."
Por todo lo descripto queda claro que las mujeres no son menos inteligentes que los hombres sino que necesitan, determinadas por las hormonas,más conexión e interacción social.Si existen menor número de científicas no es por falta de capacidad sino por una necesidad de vincularse socialmente.
Es común escuchar entre los reclamos femeninos,"no me entiende", "no habla,no sé lo que le pasa", "le digo porqué estoy enojada pero ni se acuerda de lo que pasó",en definitiva, a diario las diferentes percepciones,masculina y femenina, chocan ,unas veces, y aparecen como irreconciliables, otras.Parece que la fisiología de nuestros cerebros nos dan argumentos para tomarnos "esas discusiones" con un poco de humor,si no te entiende ayudálo y si no habla de sus emociones es porque no puede.Pidamos lo posible,no pidamos peras al olmo!
Humor gráfico de Maitena
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