"¿Se da cuenta, general, de que Evita está ganándole la batalla de la historia?" le preguntaba Tomás Eloy Martínez despertando la furia del General Perón.El golpe que dio el General en su escritorio quedó congelado en el tiempo con la grabadora del periodista, dejando en claro el temor que sentía el líder, a esa menuda gran mujer que fue Evita.
"Eva fue un producto mío.Yo la preparé para que fuera lo que fue. En la mujer hay que despertar las dos fuerzas extraordinarias que son la base de su intuición: la sensibilidad y la imaginación. Cuando esos atributos se desarrollan, la mujer se convierte en un instrumento maravilloso de la voluntad del hombre. Claro, es preciso darle también un poquito de conocimiento. De otro modo, no sirve ni para los menesteres".-le dijo el General Perón refiriéndose a Evita como a su sombra cuando los hechos demostraban lo contrario; los trabajadores la seguían como a una Diosa,implacable,vigorosa, furiosa,resentida y colérica, pero también, capaz de dar batallas hasta perder su vida.
"Fanática y sectaria, incapaz de transar con lo que no es peronista" diría un Perón más satisfecho con la obediencia de su segunda esposa y vicepresidenta María Estela Martínez de Perón de quien López Rega diría:"Vea, general: esta sí que es una mujer hecha y derecha. De acero para obedecer sus órdenes y llena de ternura cuando se le tocan los sentimientos".
Obediente al General Perón primero y a su consejero mesiánico López Rega después; la señora María Estela Martínez de Perón hoy, en soledad, debe responder a las demandas de un pasado que pide justicia.Las desapariciones no comenzaron con la Dictadura militar instaurada el 24 de marzo de 1976.En julio de 1972 T. E.Martínez le oyó decir que "Si para educar a los argentinos tiene que correr sangre, entonces derramaremos sangre" a lo que Perón adhirió diciendo que: "Si no lo hacemos nosotros lo harán otros.Yo perdono siempre a los infiltrados y a los traidores. Pero los que me siguen no perdonan jamás."
"Fanática y sectaria, incapaz de transar con lo que no es peronista" diría un Perón más satisfecho con la obediencia de su segunda esposa y vicepresidenta María Estela Martínez de Perón de quien López Rega diría:"Vea, general: esta sí que es una mujer hecha y derecha. De acero para obedecer sus órdenes y llena de ternura cuando se le tocan los sentimientos".
Con respecto a la capacidad de la segunda esposa le dijo a Tomás Eloy Martínez en el año 1970 que :"He tenido muchos discípulos en la vida.Ninguno ha llegado tan lejos como Isabel en el aprendizaje de la conducción. En cada tarea que le he encomendado ha hecho las cosas muy bien. Tiene inteligencia e instinto, y a mi lado ha ido adquiriendo una habilidad para mandar mejor que la de los políticos profesionales".
Obediente al General Perón primero y a su consejero mesiánico López Rega después; la señora María Estela Martínez de Perón hoy, en soledad, debe responder a las demandas de un pasado que pide justicia.Las desapariciones no comenzaron con la Dictadura militar instaurada el 24 de marzo de 1976.En julio de 1972 T. E.Martínez le oyó decir que "Si para educar a los argentinos tiene que correr sangre, entonces derramaremos sangre" a lo que Perón adhirió diciendo que: "Si no lo hacemos nosotros lo harán otros.Yo perdono siempre a los infiltrados y a los traidores. Pero los que me siguen no perdonan jamás."
Más de ochocientos secuestros, unas quinientas muertes fueron el número de víctimas de la Triple A,fuerza parapolicial, creada en pleno gobierno democrático.Había que educar aunque fuera matando como lo harían después los militares del 76, hacer desaparecer, reeducar y aniquilar toda fuera contraria al poder de turno, dejaron huellas que aún reclaman justicia.Aunque el ex ministro de Economía Lavagna diga que es un "montaje para distraer la atención" espero que la Justicia responda a las demandas de la historia.
Discurso de Evita
Discurso de Perón 01/05/1974 .Se escucha, al principio del video, "Qué pasa general, está lleno de gorilas el gobierno popular", lo que irrita a un Perón rodeado de López Rega, Lorenzo Miguel e Isabelita, que acusa a los jovenes de la Juventud Peronista y Montoneros de "imberbes y estúpidos". Éstos, que ocupaban el 30% de la Plaza de Mayo, abandonan el acto en masa, lo que maliciosamente fuera interpretado luego como "expulsión", cuando en realidad fueron las organizaciones revolucionarias las que se retiraron dejando a Perón con quienes él eligió quedarse.Fuente:El ortiba
Isabel en manos de la Justicia, detenida y ahora liberada esperando la resolución del juicio de extradición:
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